La Policía detuvo ayer a once personas sospechosas de estar involucradas en el secuestro del joven Eduardo Antonio Baldera, ocurrido el pasado 18 de de este mes en Nagua.
La detención se produjo durante un allanamiento en una vivienda del sector Manganagua, del Distrito Nacional. Entre los apresados figuran la señora Yudelkis Almonte Herrera, quien dijo ser la inquilina de la casa, y su hermano Omar Almonte, uno de los implicados en el secuestro, de acuerdo a la Policía.
Agentes policiales, acompañados de un fiscal, irrumpieron en la vivienda, donde también se incautaron de varios celulares y una computadora.
En la casa requisada opera un taller de ebanistería en el que trabajan algunos de los apresados, que no fueron identificados.
Solidaridad. El padre y otros familiares del joven secuestrado pidieron ayer la intervención del Comité de los Derechos Humanos, iglesias, universidades y otras instituciones de la sociedad civil del país en procura de recuperar sano y salvo a Baldera Gómez.
Durante un encuentro con la prensa, donde estuvieron representantes de los Derechos Humanos de sus filiales Santo Domingo y Nagua, Francisco Eduardo Baldera, padre del joven raptado, pidió a todas las instituciones que hacen vida social en el país a que unifiquen esfuerzos para resolver la situación de su hijo.
A once días del secuestro, Baldera informó que no ha recibido señales de vida de su hijo, por lo que dijo encontrarse en una situación desesperante.
Padre dispuesto a negociar
El comerciante Eduardo Baldera informó que en la última llamada recibida por los secuestradores de su hijo Eduardo, hace siete días, éstos le exigieron cinco millones de dólares, suma que dijo no posee.
Sostuvo que está dispuesto a negociar con los secuestradores, a quienes les ofertó dos millones de pesos a cambio de que le devuelvan a su hijo sano y salvo, porque es la suma que puede conseguir.
0 comentarios:
Publicar un comentario